Silvio Ramaglia:
Del origen del rock argentino a la visión integradora
El asociado de la Mutual en la delegación San Justo Silvio Ramaglia tiene, por lo menos, dos vidas: la de músico y la de filósofo, si es que una y otra disciplina no son una sola cosa, según se mire.
Empezó a estudiar guitarra a los diez años e integró el coro del Colegio Nacional de Buenos Aires, donde fue compañero de estudios de próceres del rock nacional como Tanguito, Moris, Miguel Abuelo y los integrantes del legendario Trío Manal, una de las piedras basales de lo que vendría después en materia de música moderna hispanocantada.
“Fui catalizador de esa movida –dice-. El rock nacional nació en el Nacional Buenos Aires” asegura, y agrega que en ese ambiente escolar se movían Claudio Gabis, Javier Martínez y Alejandro Medina (quienes formaron Manal) además de Jorge Álvarez, productor, editor y escritor emblemático de esos años de la cultura argentina. Y no se olvida de Pedro Pujó, quien fundó el sello discográfico Mandioca en el que Silvio graba un disco.
Grabó su disco solista «Novedades», escribió la comedia musical «Quiero que sepas» y su tema «Blusambo» junto a Guadalupe Raventos, producido por Litto Nebbia. Es también dibujante y publicó artículos sobre música en diarios y revistas.
Ramaglia es verborrágico contando su historia. Sus 74 años y su cercanía juvenil con los iniciadores del movimiento del rock nacional le dan entidad suficiente para referirse al tema. Cuenta de idas y venidas, de fiestas y bares, de amistades forjadas en los años del idealismo como resistencia a la dictadura de Juan Carlos Onganía. Y una nota de color: “La Balsa no se compuso en el baño de la Cueva –afirma, confidente-, sino en un pasillo del bar que llevaba a la zona de los baños. Ahí Tanguito y Lito (Nebbia) se pasaron los acordes y empezaron a componer los primeros versos de la letra”. Una apostilla más a las muchas que se cuenta sobre la autoría del himno de la juventud local de aquellos años.
De todos esos recuerdos surgió “La génesis del rock argentino (1965/69)”, libro de su autoría editado en España y que va en busca de una segunda versión en formato electrónico que llevará por título “Bases del Rock Nacional (1965/69)”.
Pero Silvio hace hincapié en su faceta filosofante. Es cuando, como quien saca un as de la manga, habla de la Visión Integradora, según la cual “el universo no es sólo una estructura física y energética en el sentido convencional, sino también un ente que posee una gama emocional intrínseca –explica-. Este concepto introduce la idea de que las emociones no son exclusivamente humanas, ni tampoco meras combinaciones de átomos en el reino del azar, sino que están presentes en la creación formando parte del cuerpo emocional del universo”.
“El Nuevo Paradigma Totalizador –refiere Silvio- plantea la existencia de una supraconsciencia, una inteligencia universal que subyace a la aparente aleatoriedad, proporcionando un marco en el que los patrones y el orden emergen de manera coherente”.
El tema da para explayarse mucho más allá del espacio disponible para esta nota, y de hecho Ramaglia lo hace acercando notas ampliatorias. “Todo tiene que ver con todo”, responde sin chistar, cuando se le pregunta por una conexión entre su visión integradora y los orígenes del rock nacional.