nota editorial junio 2006 AGENDA En este número especial del periódico queremos mostrarle los servicios, uno a uno, detallando su importancia y el fácil acceso a ellos y es nuestro mayor deseo es que conserve esta agenda y empiece ya a requerir los servicios que los están esperando y por los cuales, usted contribuye a establecerlos y mantenerlos con su cuota social. Cada uno de estos servicios lleva un largo camino de pruebas y contrapruebas, de innovación y tecnificación, de crecimiento, desarrollo y consolidación y, además pensamos que con la ayuda de todos los asociados podremos ampliarlos, mejorarlos, renovarlos e incluso incorporar otros nuevos, respondiendo a las sugerencias, propuestas e iniciativas que nos hagan llegar. Si bien sabemos que la Mutual, como integrante de la economía social y solidaria, tiene un rol que cumplir de gran trascendencia, para cambiar las condiciones en que se desenvuelven las comunidades que representamos, es también de nuestro conocimiento que no lograríamos ese objetivo, sino producimos el desarrollo de la acción de la Entidad con prestaciones de calidad y encaminadas a reparar las innumerables carencias que en ese sentido, tienen en nuestro país los estamentos del Estado. Esta realidad de nuestra sociedad es, en mayor o menor medida, existente en el resto de los países del mundo, aún los más desarrollados económicamente. La gran diferencia que distingue a éstos últimos, es que tienen conciencia de sus limitaciones y hacen posible que las Entidades sociales, como las Mutuales, tengan en sus manos la responsabilidad de subsidiar a esos estados, mediante el amparo que se genera de los servicios y beneficios que prestan a sus asociados. Es preciso destacar que la ventaja de mayor importancia en esa política, es que se ha comprobado que nadie puede preservar mejor los derechos a la salud, educación, cultura, recreación, esparcimiento y en general a mejorar la calidad de vida, que los propios interesados, con el agregado que dentro del sistema mutualista son ellos quienes administran, conducen y disponen democráticamente las medidas conducentes a lograr esos beneficios. Entre todos, estamos construyendo, con la herramienta de nuestra mutual, una sociedad más justa y equitativa, creando la igualdad de oportunidades, para la realización integral de cada persona, en condiciones dignas. Alfredo Sigliano Presidente AMPF